martes, 2 de agosto de 2011

[Es]tiras de un verano o Madrid no se acaba nunca

Antes no era así. Pero ahora, cuando estalla julio en tormentos de verano, está la compañía para beberse [no Martín Códax pero sí el frescor y el cuerpo de noches infames] y bailar con las sombras canciones sin nombre que suenan a soul.
Amanece calma. 
 Descubres que flotas descalza entre paredes blancas; 


Caes en quince, en siete y en tres tiempos, te alzas en dos, en uno, [respiras]
Y cuando te cierran los ojos [lejos, muy lejos, se apaga el rumor de truenos] descubres que la oscuridad es un lienzo de seda que te envuelve y te protege de suplicios que no tienen que ver con madrugar por las mañanas y así, ojos cerrados, planeas, exploras, buscas recovecos, te abres [en círculos], te arrastras, te meces, te lanzas, y [movimiento auténtico] en los tiempos que hagan falta, te incorporas a tiempo para que suenen campanas. 


Agosto abre los ojos, y mira al final del cable. Comienza [despacio, sin miedo] a caminar. 

4 comentarios:

Beíta dijo...

Tiembla agosto, que llegará septiembre
;)

¡Mua!

Anónimo dijo...

camina con inquietud pero no te detengas, el suelo es solo una ilusion perceptiva.

besos.
horacio

Canichu, el espía del bar dijo...

te abro link en la lista de links de mi blog.

Yeka dijo...

Yo no soy experta en literatura,´ni nada parecido, sólo respondo a mis sentidos. Y este texto me conmueve y me despierta.